Si somos usuarios de ordenador portátil, o de un ordenador sobremesa con una pantalla pequeña es habitual que esto ocurra ya que sólo podemos tener una ventana a la vez de manera cómoda. A partir Windows 7 se permite tener abiertas varias ventanas a la vez una al lado de otra en la misma pantalla.
Esto es muy cómodo en pantallas grandes por que no tenemos que estar minimizando una ventana para trabajar en otra. Pero esto no es siempre posible, para intentar resolver este problema Windows 10 permite tener varios monitores para tener una ventana (o varias) en cada uno.
Esto es habitual en PCs portátiles ya que tienen al menos 1 salida para monitores y algunos PCs de sobremesa también tienen varias de estas salidas dependiendo de su tarjeta de vídeo. Para poder usar estas características tenemos que configurar Windows para poder usar esta segunda pantalla (para esto tiene que estar conectada a una de las salidas del PC, sobre todo en portátiles), esto es fácil de hacer, a la derecha de la hora hay un icono, al seleccionarlo aparecen un montón de opciones, la que importa es proyectar, dentro de esta hay más opciones, la primera es pantalla del pc, con esto solo hay vídeo en la pantalla propia del portátil, la segunda opción es duplicado, que lo que hace es mandar la misma señal que sale en pantalla (esto es muy útil para presentaciones en un proyector), la tercera es extender pantallas, que permite tener varias ventanas en cada pantalla de manera independiente y la cuarta es que solo da vídeo en la segunda pantalla apagando la del propia del portátil.
Con estos secillos trucos podemos aprovechar alguna pantalla antigua que tengamos apartada y no tirarla a la basura, o si necesitmos usar una segunda pantalla por obligación y no tenemos ninguna, se pueden conseguir muy baratas de segunda mano ahorrando costes pero manteniendo su funcionalidad.